Página:La sombra - Celín - Tropiquillos - Theros (1909).djvu/206

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
200
B. Pérez Galdós

tinencia. Juegos Florales. Torneo. Veladas con Manifiesto en el Ateneo. Regatas. Iluminaciones y Tinieblas. Gran Rosario de la Aurora, con antorchas, por las principales calles, etc., etc.» La lectura del cartel, despertando en la mente de la niña de Pioz alguna de las ideas dormidas, produjo en ella cierta perplejidad.

Parecía que la realidad del pasado la reclamaba, disputando su alma á la sugestión de aquel anómalo estado presente. Pero esto no fué más que una vacilación momentánea, algo como un resplandor prontamente extinguido, ó más bien como el sentimiento fugaz de una vida anterior que relampaguea en nosotros en ciertas ocasiones. El olvido recobró pronto su imperio de tal modo, que Diana no se acordaba de haber usado nunca zapatos.

Dejando la carretera y la aldea penetraron en un bosque, y por allí también encontraron aldeanas y pastores que les saludaban con esa cordialidad candorosa de la gente campesina. Las vacas mugían al verles pasar, alargando el hocico húmedo y mirándoles con familiar cariño. Las ovejas se enracimaban en torno á ellos no permitiéndoles andar, y los pajarillos se arremolinaban sobre sus cabezas, girando y piando sin tregua.

Pero lo que más saca de quicio al cronista,